Interrumpimos la conexión

Pues sí, como dice el refrán (actualizado) el hombre (o la mujer) propone y Dios o las circunstancias disponen.
Hoy tocaba una entrega de Resonancias, pero prefiero hacerme eco de los últimos acontecimientos, que no son otra cosa más que varias bofetadas de realidad. El viernes caí en la cuenta de repente de que el supuesto remoto día 23 en que tenía que entregar el siguiente essay era en realidad el viernes siguiente. También he caído en la cuenta de forma súbita del nivel de inseguridad de Londres. Si uno retiene en la memoria los altercados, navajazos, muertes y demás que cuentan como píldoras en la radio a diario y sobre todo si se fija en cuántos de esos ocurren en la zona sur y luego lo relaciona con las sirenas y coches de policía y policías locales en bicicleta o caminando que ve de vez en cuando por algunas zonas cercanas a la suya (en este caso cercanas a la mía, pero no la mía, gracias a Dios) repara en que esto tiene mucho de polvorín.
Y por último, pero no por ello menos importante, he sabido de alguien que está realmente pachucho. ¡¡Mucho ánimo, doctora House!!
Pues sí, la vida a veces es complicada, mucho curro y mucha responsabilidad, gente que se comunica a navajazos y problemas serios de salud de gente a la que quieres, que además de afectarte por empatía te hace pensar en tu propia fragilidad.
A por ellos. A lo mejor no son pocos ni cobardes, pero nosotros somos muchos y tenemos razón, ¿no?

2 respuestas a «Interrumpimos la conexión»

  1. Y, si no tenemos razón, que se atrevan a venir a decírnoslo, hombre ya…
    PS.: Sé de buena tinta que la doctora House progresa adecuadamente…

  2. No es sorprendente que la doctora House progrese adecuadamente, ya que me da a mi que siempre fue una empollona :-)) en el mejor sentido de la palabra.

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