Todo llega. Soy una Elsinora casi libre. Lo que definitivamente soy -sin “casi” que valga- es una figura exenta, vamos que ya no estoy pegada a una pantalla. La llevo en el equipaje de mano, eso sí, y en Madrid me tocará rematar algunas cosas pero a un ritmo mucho más tranquilo.
Esta última tesina ha sido más accidentada que el resto (problemas logísticos y de recursos humanos: hasta ahí puedo leer), probablemente por cortesía del personaje algo malaje que se sacude responsabilidades a golpe de preferiría no hacerlo. Sea como fuere, finalmente, ayer tarde conseguí entregar mi traducción sobre el relato de Herman Melville. Para ello ha habido que saltar algunos obstáculos. Y claro, el carapantallismo no da para una forma física envidiable, pero en fin, la maña y los buenos amigos obran milagros. Y supongo que también la veteranía: a estas alturas me sé todos los trucos sobre tesinas en mi college. Así que los ratones que se rebelan, los cambios que parece que no se han guardado, y las elementas y elementos diseminados por el camino (entre ellos Elsinora misma, para qué nos vamos a engañar) para dificultarme la tarea no han tenido éxito.
La cosa es que he terminado de imprimir las dos copias poco tiempo después de la hora límite, siendo hora límite el momento en que la secretaria del departamento de inglés se va. Pero a mí esas cosas no me arredran (a grandes males think big… o algo así), así que he estado acosando la puerta de la planta 5 que es donde está el departamento de English, que estaba cerrada a cal y canto. Nadie por la puerta de la izquierda ni nadie por la derecha. Al rato, a través del cristal de la puerta, he visualizado a lo lejos a un ser, que afortunadamente, después de preguntarme si no me importaba volver mañana (¿desde Madrid? preferiría no hacerlo) me ha abierto. Resulta que le conozco y es bastante majo. En todo caso, el personal de mi universidad es muy servicial, no sé si es algo general de las facultades de la Pérfida.
No he hecho mucha fiesta, porque estaba machacada, ya que además del machaque de escribir la tesina nos hemos pasado el día hablando de cómo escribir una tesis y explicando cómo nos habíamos organizado el proceso de investigar y escribir. Yo le he echado mucha imaginación, ya que apenas había dedicado tiempo al tema de la tesis. La sesión preparatoria de la tesis merece post aparte, creo. Ya celebraré en Madrid que el Master casi está terminado. Vaya que sí.
Pues felicidades!
Ya tocaba 😉
Pues sí. Ya estoy en Madrid. Con solecito y descansando.
Imagino que ya te lo estarás pasando bien por Madrid. Enhorabuena por tu libertad.
bien por ti!!
te queremos !
bien por ti!!
te queremos !
Ole con ole
😉 muchas gracias!